Pobreza: la crisis social se agrava, trasciende gestiones y el gobierno reedita el discurso de la herencia
El Índice de Pobreza alcanzó al término del primer semestre del año al 52,9%, por encima del 41,7 % de finales del año pasado, y del 40,1% de enero-junio del 2023, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Es decir, más de la mitad de la población es pobre, también creció la indigencia y en el caso de los niños la situación es todavía más grave. Se trató del primer dato oficial sobre las condiciones de vida de los argentinos del gobierno de Javier Milei, que reeditó preventivamente el discurso defensivo de la herencia recibida, y al mismo tiempo busca instalar una mirada optimista a futuro, con la perspectiva de un repunte económico que ya estaría en marcha.
De acuerdo al dato del Indec, sobre una población de 46 millones, 24,3 millones son pobres. En tanto, el índice de Indigencia, entendido como los pobres cuyos ingresos no son suficientes ni siquiera para comprar la cantidad mínima de comida que permita la subsistencia, se ubicó en 18,1%, es decir, aproximadamente 8,3 millones de personas.
Durante el primer semestre se registró caída en el nivel de la actividad económica del 3,2%, y la tasa de desocupación pasó del 5,7% de finales del 2023, al 7,6% al terminar a finales de junio, también según datos del Indec. Entre finales del 2023, y junio de este año la inflación alcanzó al 79,8%, y si bien el Índice de salarios aumentó 84,3% en el primer semestre del año, no todos los empleados tuvieron el mismo aumento ni se llegó a compensar lo perdido en el periodo previo, y el sector más afectado fue, una vez más, el informal, que además habría crecido respecto del empleo registrado.
Vale recordar que del Frente de Todos de Alberto Fernández y Cristina Kirchner inició su mandato, en el 2019, con un 35,5% de pobreza, y lo dejó con 41,7%, además de haber terminado su gestión con una inflación totalmente desatada y un descalabro económico notable. El gobierno de Cambiemos de Mauricio Macri asumió sin número confiable de pobreza por la intervención K del Indec, pese a que se estimaba cercana al 30% y terminó con 35,5%, aunque había llegado a reducirla en torno al 25% a mediados de la gestión.
En las horas previas a que el Indec diera a conocer la cifra de pobreza este jueves, el vocero presidencial Manuel Adorni, salió a defender la gestión económica libertaria y afirmó que “si no se evitaba la hiperinflación la pobreza se hubiese llevado a cerca del 95%”.
«Nos dejaron implantadas un montón de bombas que iban a afectar la actividad y también a los salarios reales y a la inflación», sostuvo Adorni durante la habitual conferencia de prensa que realiza en la Casa de Gobierno. El funcionario también destacó que desde el gobierno de Javier Milei hacen «todo para que cambie. De hecho hace cuatro períodos que el salario comenzó a recuperarse».
Adorni aseguró que «la gente votó al Presidente diciendo que su principal objetivo era bajar la inflación, ordenando la macroeconomía. Y siempre dijimos que 2024 iba a ser peor que 2023«.»A la Argentina la han despedazado y reconstruirla lleva tiempo y lo marca la historia, al margen de que, repito, recibimos una Argentina en las peores condiciones históricas que se pudo recibir un país», concluyó el vocero presidencial, en línea con lo que viene trasmitiendo el ala económica del Gobierno, que asegura que las señales de recuperación ya son un hecho, aunque todavía no lleguen a sentirse demasiado, y que la reactivación ya comenzó.
