Entre la reforma laboral y la privatización de Aerolíneas, el Gobierno hace equilibrio con los gremios
Finalmente, el Gobierno nacional reglamentó el capítulo laboral de la Ley Bases, cuya letra chica fue el resultado de largas semanas de negociaciones con el empresariado y la CGT, e incluye un esquema para reemplazar el sistema actual de indemnizaciones y un blanqueo laboral. El Ejecutivo, en paralelo, avanza -aunque con demoras- en su plan de privatización de Aerolíneas Argentinas, resistido por los gremios aeronáuticos, pero al mismo tiempo posterga iniciativas parlamentarias para evitar mayores tensiones con el sindicalismo.
El plan original de la Casa Rosada era, de hecho, reglamentar la reforma laboral la semana pasada, pero la decisión fue postergada por diferencias con los gremios. En lo que refiere a indemnizaciones, la norma establece que «mediante convenio colectivo de trabajo, las partes podrán sustituir la indemnización prevista en el artículo 245 de la ley 20.744 por un fondo o sistema de cese laboral conforme los parámetros que disponga el Poder Ejecutivo nacional. Los empleadores podrán optar por contratar un sistema privado a su costo a fin de solventar la indemnización prevista en el presente artículo y/o la suma que libremente se pacte entre las partes para el supuesto de desvinculación por mutuo acuerdo conforme artículo 241 de la ley 20.744. En todos los casos, las empresas podrán auto-asegurarse en el sistema que se defina”.
Es decir, se establecería un sistema optativo de indemnizaciones, negociable entre empresarios y sindicatos, de adhesión voluntaria, que permitiría a los trabajadores mantenerse dentro del régimen vigente. La ley también incluye un blanqueo laboral, con una condonación de deudas por aportes y contribuciones, multas y sanciones, y una simplificación del registro laboral. Sin embargo, no hubo acuerdo con el gremialismo y no quedó reglamentado el artículo que califica como grave injuria laboral la participación activa en bloqueos contra empresas.
El Gobierno mantiene negociaciones intensas con los distintos sectores del gremialismo y fundamentalmente con la CGT. El martes, aceptó un pedido de la central gremial peronista y La Libertad Avanza le retiró el respaldo a un proyecto impulsado por la UCR, el PRO, la Coalición Cívica, La Libertad Avanza, Encuentro Federal e Innovación Federal, que planteaba una fuerte democratización sindical. La oposición dialoguista tiene previsto presionar de nuevo en las próximas semanas al oficialismo, que argumentó su postura en una decisión de privilegiar la aprobación del Presupuesto 2025 y la privatización de Aerolíneas Argentinas.
Ayer, mientras gremios aeronáuticos realizaban una protesta frente al Congreso, el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y el secretario de Transporte, Franco Mogetta, defendieron la privatización de Aerolíneas Argentinas en un plenario de las comisiones de Transporte y Presupuesto de la Cámara de Diputados, con duros cuestionamientos contra el gremialismo y la amenaza de que la compañía podría llegar a cerrar si continúan las medidas de fuerza. Sin embargo, no se alcanzó un consenso suficiente para un dictamen de mayoría, aunque se encuentran bajo tratamiento proyectos de un aliado del oficialismo como el PRO, pero también de bloques de la oposición dialoguista como la Coalición Cívica. La discusión en la Cámara Baja continuará.