El Gobierno se entusiasma con el triunfo de Trump y apuesta a ser el socio regional de EE.UU., mientras define al nuevo embajador en Washington
El triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos generó, o al menos así lo trasmitieron desde la Casa Rosada, un clima de euforia en el gobierno de Javier Milei, que celebra la llegada de un aliado ideológico a la Casa Blanca tanto por sus potencialidades discursivas para la disputa política interna, como en materia económica, y que ve una oportunidad para instalarse como un socio estratégico de EE.UU. en la región. En este contexto, se vuelve inminente la elección del próximo embajador argentino en Washington, cargo vacante tras la reciente asunción de Gerardo Werthein como ministro de Relaciones Exteriores, quien, por otra parte, ya inició una «purga» en Cancillería.
Hasta el día de la elección norteamericana, la Casa Rosada había evitado emitir manifestaciones públicas de apoyo, a la espera de un resultado electoral que terminó siendo menos reñido que lo que se estimaba en la previa, aunque era evidente una clara preferencia por el republicano. Con Trump en el poder, funcionarios de alto rango anticipan un espaldarazo para la «batalla cultural» que Milei estaría dando, según la interpretación oficialista, tanto a nivel nacional como internacional, contra agendas de izquierda o «progresistas».
En el Ejecutivo trabajaban para intentar concretar en las próximas horas una conversación telefónica entre el presidente y el mandatario estadounidense electo. Milei tiene intenciones de viajar el 20 de enero de 2025 a la ceremonia de asunción que se celebra en el Capitolio, en Washington DC, pero no estaba prevista por el momento una visita previa a la asunción de Trump.
Definición del embajador en Washington: nombres en danza y sintonía política
Resuelta la elección norteamericana, queda despejado el panorama para la definición del nuevo embajador en EE.UU. puesto para el que ahora sin dudas la administración libertaria elegiría un perfil alineado con el conservadurismo de la administración republicana.
Entre los nombres que circulaban en canales oficiales, se encuentra el jefe de asesores económicos del Presidente, Demian Reidel, quien mantiene una buena relación con el empresario Elon Musk y que destacó las ventajas que supondría el triunfo de Trump: «Estados Unidos es un aliado clave para Argentina y una administración de Trump es una gran noticia para el país. ¡Milei incluso es amigo! Esto está sucediendo”, expresó Reidel en sus redes sociales, reafirmando el vínculo cercano entre ambos líderes.
También se barajan otros nombres con experiencia diplomática, como Francisco Tropepi, actual embajador argentino en la ONU y ex número dos de Werthein en la embajada en EE.UU.; Guillermo Nielsen, embajador en Paraguay y cercano a Milei; y Alex Campbell, dirigente dle PRO, exfuncionario en la gestión de María Eugenia Vidal, aunque su designación parece menos probable. Otro que sonaban con insistencia en los últimos días era el hoy secretario de Turismo, Ambiente y Deporte, Daniel Scioli, con experiencia como embajador en Brasil.